lunes, 4 de octubre de 2010

Correspondencias


Siempre me ha gustado pensar que cuando un sentimiento es verdadero, siempre es correspondido. Claro que esto trae una serie de contradicciones. Ahora pienso que lo que yo sentía por ti no era verdadero, porque tú no me correspondías. A tu lado, pocas han sido las veces que me he sentido querido. Por mucho que hayas hecho por mí, siempre hacías algo para que me olvidara de todo, para que todo fuese como hasta entonces. Eternamente desaparecido…sin importar las veces que hiciera por verte. Nunca aparecías. Nunca lograbas hacer que las lágrimas que siempre necesito soltar salieran, nunca conseguiste desahogarme, por mucho que yo quisiera. Para mí lo eras todo, y yo para ti no era nada. ¿Entiendes ahora como me siento? Para mí siempre fuiste lo primero, antes incluso que el amor. Y yo para ti no era ni como el resto de tus amigos, era mucho menos. Ver como tratabas a gente a la que no importas y que no te importa mucho mejor que a mí me hacía pensar si realmente yo tenía razón, o todo lo que yo sentía era una pura paranoia creada en mi cerebro. La verdad, me a veces me gustaría pensar que sí, que todo era una invención mía, que mi enajenación mental hizo que yo pensara que para ti yo era algo, que era un amigo. Es verdad que con el tiempo hice que pareciera que te importaba, pero siempre volvías con un nuevo palo, siempre hacías que mis problemas fueran mayores. Porque aunque tú no lo sepas, siempre he querido que tú fueras para mí esa persona que dicen todos, ese “amigo”: persona especial para ti por algo, a la que puedes contarle todo, porque confías en él, te sientes bien a su lado y le quieres como un hermano. Pero claro, tú nunca te has dado cuenta de eso, nunca me has preguntado por mis problemas.

Todo esto hace que yo piense que esa proposición que al principio expuse sea falsa, aunque lo más probable es que no lo sea, y que todo lo que yo sentía eran ganas de sentir lo que sentía por ti, todo era falso, era cosa mía solo. Y lo peor de todo es que te he hecho perder mucho tiempo con alguien que jamás te importará. Seguiré luchando para que estas heridas imaginarias, pero que siento como si fuesen reales, cicatricen poco a poco, y algún día, poder empezar de cero.

No hay comentarios:

Publicar un comentario