martes, 24 de mayo de 2011

INCREDULO

Otra vez esa sensación. Vuelven las lágrimas a llenar las cuencas de mis ojos. 0 a la izquierda. Esa sensación que tiene alguien cuando se da cuenta de que no importa a nadie, de que si no estuviese no se le echaría de menos. Es alguien insignificante, una pieza que no sirve más que de adorno. Y lo peor de todo es que el culpable no se da cuenta de lo que pasa.
Pasa que estas bien, feliz incluso, y de repente todo cambia. Te das cuenta de que tu diario te miente. Aquella persona a la que se lo cuentas todo, absolutamente todo, pasa de ti. No solo no te cuenta lo que pasa en su vida, es peor. Te das cuenta de que esa persona, con la que pasas todo el tiempo del mundo, que lo sabe todo sobre ti, prefiere contarle sus penas y alegrías a personas que no ha visto en su vida antes que a ti. Te enteras de cosas que no tenías ni idea de que ocurrían. Por casualidad, alguien de tu entorno te suelta una información sobre esa persona como si tú ya la supieras, y te encuentras a ti mismo con cara de incrédulo ante tal situación. 
Y volvemos al principio: tristeza, agonía, silencio. Todo a tu alrededor parece que se te cae encima. Y lo único que quieres hacer es ir delante de esa persona y demostrarle que sabes eso, que sabes lo que le pasa, aunque no te lo haya contado. Pero no lo haces, ante todo tienes dignidad, y prefieres el silencio al cabreo. Prefieres dejarlo correr, hacer como si nada hubiera pasado, pero entonces vuelve a pasar. 
Vuelves a enterarte de cosas, de cosas que no tenías ni idea de que existieran. Y cada vez por gente que menos tienen que ver con esa persona. Te sientes estúpido, engañado. Y vuelven las dudas. No, no vas a decir nada, has tenido un plan mucho mejor. Tu ciencia de la reciprocidad te dice que todo siempre tiene tiene que ser recíproco, todos los sentimientos, todas las acciones. 
Ahora lo tienes claro. Ya sabes lo que vas a hacer. No vas a contarle nada, nada de nada, acerca de ti. Si esa persona no quiere contarte lo que le pasa, quizás no este interesada en lo que ocurre alrededor de ti. A partir de ahora, la ley del silencio será total. TOTAL.

No hay comentarios:

Publicar un comentario